Es cierto que el error en la manifestacion fué grosero. Pero, bien pudo pasar inapercibido, en el cúmulo de operaciones que realiza la Aduana cada dia. Ademas, se observa que los hongos y las anchoas que se manifestaban por cigarros, no estaban en la Aduana, ni vinieron despues. Habría, pues, lugar á pensar que el error, por notorio que fuera, no era tan inocente, ¿Cómo es que se solicitaba el despacho de artículos que no existian, ni siquiera estaban para venir, puesto que no han llegado ? Sírvase V. E. confirmar la sentencia apelada, Eduardo Costa.
Fallo de la Suprema Corte Buenos Aires, Noviembre 20 de 1884.
Vistos: por sus fundamentos y de conformidad con lo espuesto y pedido por el Señor Procurador General, se confirma la sentencia apelada de foja cincuenta y dos vuelta y repuestos los sellos, devuélvase.
3. B. GOROSTIAGA.— J. DOMINGUEZ. —
ULADISLAO FRIAS. — FEDERICO IBAR-
GÚREN.
———;EDAD Eee
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Año: 1884, CSJN Fallos: 27:317
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