castigaba su caballo como atropellándolo, se paró para stenderlo y arreglar su recado, desmmontóse, quedándose al lado izquierdo del caballo; el sujeto aludido se aproximó del tado derecho cruzando el caballo con el suyo, lo que le Tlamó la atensión por lo cual le dijo: "yo creo, señor, que no le he ofendido a usted en nada para que me atropelle en esa forma, pues yo no lo conozco a usted y usted tampoco a mi", y éste le contestó: "y ahora adónde vas", contestándole el declarante "a recorrer el campo": y aquél en forma altanera le dijo: "que vas a hacer, te vas a la estancia a alcahnetear tal vez que nosotros andinos robando", repitiéndole "con alcahueterias vas, pero no vias a ir", y al imsmo tiempo bajóse de su caballo, por lo que el de clarante disparó; que al darse vuelta vió al sujeto sacar ena cuchilla y avanzar: al ver tal actitud sacó su revólver haciendo un tiro al aire, diciéndole que no lo comprometiera; pero aquél sin hacer caso siguió atropellándulo y cuando lo alcanzó le tiró tres puñaladas, lo que evitó saltando atrás: que tcdo ssustado le pedía que no lo matara, y en ese instante, sin darse cuenta.
sintió un tiro, viendo que su agresor caía en tierra, aprovechando el deponente para montar en su caballo y retirarse.
HI. Los acompañantes de la víctima Máximo Sandoval a fojas 13; Carlos Pinila a fojas 16 vuelta, y Félix Pérez a fojas 19 vuelta están contestes en manifestar los hechos de que tienen conociniento y que se relacionan con Segundo Zapatr. Sundoval dice: que el día del hecho se dirigian los cuatro arrcando una tropilla de potros en dirección a una tranquera que de sitida al campo de la estancia La Anita; que para ello pidieron a e Zapata que se adelantara y abriera la tranquera; que en esos momentos los potros se dispararon, consiguiendo volverios. y — desde una altura distinguió a Zapata cerca de la tranquera que conversaba con_otro jinete; este último no lo vieron Pinilla ni Pérez ; como el terreno es muy quebrado, lo perdieron de vista, hasta llegar a inmediaciones de la tranquera, en que notaron «que Zapata yacía en tierra, viendo un jinete que disparcha:; que ai aproximarse lo Pamaron creyendo que hubiera rodado,
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Año: 1933, CSJN Fallos: 166:9
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