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316 FALLOS DE LA SUPREMA CORTE gacion hecha por la Policía de Francia, lo acompañaba en su viaje ú este país.

Busqué prolijamente en las listas de hoteles y casas de hospedajo el nombrece Capaldi, pero sin ningun resultado.

Mo supuse que este individuo, á fin de economizar los gastos de viaje y de traslación 4 algun punto dela República, se hubiese amparado de la ley de inmigracion y desembarcado en calidad de tal.

Al efecto me trasladé ul Hotel de Inmigracion, donde efectivamente encontré el nombre de Antonio Capalda, haciéndome presomir que fuera el mismo Capalla el hecho de que, á renglon seguido, figuraba el de Salvador Peruchino.

Tres dias había estado en el Hotel de Inmigracion, de donde salió diciendo iba á trabajar en esta ciudad. Nuevas investigaciones que practiqué me hicieron abrigar la creencia de que Capalla hubiese ido á la Oficina Nacional de Trabajo, Felizmente resultó fundada esta creencia ; tres dias despues que Capalla saJió del Hotel de Inmigracion, había ido á la oficina mencionada, pidiendo ser trasladado á la ciudad del Rosario (Provincia de Santa FC). Figuraba allí con el nombre de Antonio Zapaldi, pero la circunstancia siempre de figurar á renglon seguido el nombre de Salvador Peruchino, me hizo otra vez suponer que era el mismo Capalla.

De acuerdo con las instrucciones que recibí de V. S. me trasladé inmediatamente ú la ciudad del Rosario, acompañado del oficial principal D. Domingo H. Zunini y del agente José M, Gramajo. En esta ciudad encontré nuevamente la huella del prófugo; juntamente con Salvador Peruchino habían tomado pasaje en el Ferro-Carril Central Argentino, para la ciudad de Tucuman.

Siendo necesaria mi presencia en esta capital, regresé ordenando al principal Zunini y al agente Gramajo siguiesen viaje hasta aquella ciudad, debiendo detenerse un dia en la capital

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Año: 1888, CSJN Fallos: 34:316 
Extraido de : https://universojus.com/csjn/tomo-34/pagina-316