- Máquina que muele. Edificio dedicado a la molienda. Persona molesta. En la jerga, tormento dado a un sospechoso o perseguido.
Especialmente con motivo del aprovechamiento de las aguas, surgen numerosos problemas y conflictos a causa de los molinos, origen de la profusa legislación sobre la materia; como lo dispuesto en el Fuero Viejo de Castilla (lib. VI, tít. IV), en el Fuero Real (lib. III, tít. IV, y lib. IV, tít. V) y en las Partidas III (títs. XXVIII y XXXII) y IV (tít. V). Este último cuerpo legal permitía a cualquier vecino edificar molino o aceña en la ribera del río, siempre que no perjudicare al común, sin licencia alguna, con tal de ser propietario; o con permiso del gobierno, si la orillla fuera pública. No cabía oponerse por tener otro molino cerca, si no se impedía el libre curso del agua, aunque la renta del otro sufriera merma.
Ir al molino: confabularse contra otro, sobre todo en el juego.
[Inicio] >>